Foto con Los Reyes

Según cuentan las leyendas es una vieja tradición ir a tomarse una foto conmemorativa con los personajes de moda, para los peques, de estos días: Melchor, Gaspar y Baltazar.

Y también, los no tan peques, se dan cita en las Alamedas de la ciudad en donde están apostados varios stands con réplicas de los 3 sabios de oriente.

Pero como todo en esta existencia, esta tradición se ha ido desvirtuando, cambiando y, al estar en contacto con el oxígeno atmosférico, oxidado hasta el punto de haber escuchado hoy con Don Héctor:

"me da pena comentarlo pero... una de mis amigas dice que fue a retratarse con los reyes y a su hija, la tortearon... pero... ¿tanta es la curiosidad, morbo, maldad del hombre?

He visto, cuando hay muchachitas, que nomás andan viendo dónde poner las manos..."

Pues... dichos reyes también son hombres y al parecer también poseen líbido... pero, es que uno va a uno de esos puntos a tener un recuerdo o por tradición o qué sé yo el motivo, pero nunca buscando que uno de los personajes protagonistas de la Epifanía se lo nalgueé a uno.

Por otra parte, las obras viales han hecho estragos en algunos puntos para visitar a los también llamados 'magos' y tuve noticia que a falta de banqueta, destruída por la construcción del metro del bicentenario, Melchor, Gaspar y Baltazar andaban de esquina en esquina abordando a los transeuntes y automovilistas que se dejaran... tal fue lo que hicieron que fueron confundidos con chicas fáciles...

Fig. 2.0: "Melchor a punto de ser levantado, en Municipio Libre y Parroquia"

En fin... historias van y vienen y las cartitas volarán con los globos llenos de gas de menor densidad que el aire para que puedan flotar... allá, en lo alto encontrarán a los destinatarios que gustosos cumplirán deseos a diestra y siniestra... o no.

"En esta época del año es cuando más sufro... ¿¡ Por qué caminé entre mis prójimos con mis ojos mirando hacia abajo y nunca los levanté hacia esa Estrella bendita que guió a esos hombres Sabios a la pobre morada !? ..." (Jacob Marley en Villancico/Cuento/Canción de Navidad -según usos, costumbres y traducciones- del gran Charles Dickens)