domingo, 30 de agosto de 2009

REPORTE No.01 DEL AGENTE “MARCIANITO” GIBRANOV AL S.S. DEL SR. K.

Marte, Deimos; 30 de Agosto de 2035
Asunto: Reporte No.01 del agente “Marcianito” Gibranov al S.S. del Sr. K.
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aaaaaaaMuy. Sr. mío: Me dirijo a V. para reportar mi actuar en los lustros recorridos. Mi destino me trae de un planeta a otro, a efectos de explorar universos paralelos. Al día de hoy le manifiesto mi crónica.

Mi S.S. me notifico sobre la presencia de un cosmos que incito en mi agente, ex-espía de la extinta KGB Rusa. Un lugar donde se halla a “Dios”. Examinando su informe manifestaba su considerar del sitio como “deleznable”. Al pasar el tiempo una reminiscencia de una efigie emergió en mi psique, como “la situación en la que se encuentra el hombre respecto al conocimiento” apuntaría vuestro condiscípulo y miembro de esta entidad. “Platón”.

Cuál fue mi admiración al saber que discutíamos sobre una obra del m. y f. Félix Candela, mi agente quedo incrédulo cuando confirme dicha conclusión. Si bien, en ningún tiempo había hecho acto de presencia en dicho lugar, era sabida de su existencia.

Al terminar nuestra tertulia, mi agente me expidió una cordial invitación a percibir en entidad presente dicho lugar. La cual acepte sin titubear.

Al arribar al tempo de Dios, quede “admirado”. Contemplado esa bella obra que solo conocía en papel. Fue muy gratificante, reencendió en mi esa llama extinta por aquellos demonios de la F.A. Si bien a mi agente no le cayó en gracia del todo (ya que le agrada mas una pantalla gigante de LED´s), a mi persona le dio complacencia estar ahí, teniendo como esperanza seguir los pasos del m. y f. “Candela”.

Sin más por el momento, me despido. Esperando escribirle a V. pronto y constantemente mi reporte de actividad para vuestro S.S.


1 comentario:

Hastelloy B dijo...

Reporte recibido, Marcianito, espero que en su SS no tenga que disfrazarse, como le ocurrió a Megaman...


Esperamos más de sus crónicas a través del tiempo y del espacio.

Cambio y fuera...

--- Desarrollado gracias a la nunca bien ponderada ayuda de Energón 16